El hermanito-desconocido
Soy un pequeño canguro. Vivo muy feliz, jugando todo el día, y me siento seguro y calentito en la bolsa de mamá. Un día, mi papá me dijo: -Tengo una buena noticia que darte: vas a tener un hermanito. Pero la bolsa es muy pequeña para los dos.. ¿Dónde va a dormir? -Tú ya eres mayor, así que le dejarás tu sitio. La verdad es que no me quedé muy contento. Pero cuando nació mi hermano y vi lo guapo que era, me sentí orgulloso y empecé a gritar: -¡Tengo un hermanito, tengo un hermanito!