Atenea y Zeus -Juan Kruz Igerabide
Atenea nació a la orilla de un lago. Tres ninfas la descubrieron: -Oh! ¡Qué preciosidad! -se dijeron unas a otras. Era una niña prodigiosa, de fuerte mirada. No lloraba por nada. Fue acogida por las tres ninfas y creció bajo sus cuidados. Se desarrolló en pocos días, con una fuerza extraordinaria. Las ninfas no se explicaban de dónde le venía semejante vigor. -Solo de un dios puede provenir tanto poder -se dijeron. Estaban en lo cierto. Atenea era hija de Zeus, el rey de los dioses del Olimpo, el rey del rayo. La niña nació de una manera asombrosa. Ocurrió así: Zeus se había enamorado de una ninfa bellísima. La ninfa, en cambio, tenía miedo de Zeus, porque este era poderosísimo y bastante bruto. Zeus se presentó ante la ninfa, y le dijo de sopetón: -Voy a casarme contigo. -Pues yo contigo no -contestó la ninfa, temblando de miedo. La ninfa echó a correr, y para que Zeus no la atrapara, se convirtió en viento. Pero el dios la descubrió. Entonces, la ninfa se convir